Ud. está aqui:   Inicio Deportes Nacionales

Buscá en el Archivo de MasterNews

River sufrió dos goles en dos minutos y se le escapó de manera increíble la final de la Copa Libertadores ante Flamengo Imprimir
Usar puntuación: / 0
MaloBueno 
Sábado, 23 de Noviembre de 2019 19:05
El Millonario ganaba con gol de Rafael Santos Borré y tenía el partido controlado. Sin embargo, dos fallas en el epílogo le arrebataron el título, que quedó en manos del conjunto brasileño
 
Se define la máxima competición de clubes de Sudamérica, con un partido que promete muchas emociones. El River Plate de Marcelo Gallardo, campeón defensor, se enfrenta al Flamengo de Jorge Jesús en el Estadio Monumental de Lima, donde se disputa la primera final de la Copa Libertadores a partido único en 60 años de historia.
 
La gran definición comenzó con un juego de espejos. Los dos equipos apelaron a una presión extendida para recuperar la pelota en campo contrario y mantenerse cortos, sin ofrecer espacios. Aún teniendo una leve preponderancia, el Fla ofreció algunas grietas entre líneas, que River amenazó con aprovechar en transiciones rápidas.
 
A los 14 minutos, el conjunto de Gallardo cumplió con el presagio: Enzo Pérez usufructuó un error de Filipe Luis y habilitó a Nacho Fernández, que desbordó con esfuerzo y envió el centro atrás arrojándose al piso; una asistencia-barrida que Matías Suárez dejó pasar para desorientar y que Rafael Santos Borré convirtió en gol con un remate rasante.
El abrazo de todo River tras la apertura en el marcador
 
Con pelotas largas a las bandas o filtradas, River fue rompiendo el pressing del Mengao. También recuperó alto en más de una oportunidad, aguijoneando las dudas en la salida de su adversario. Enzo Pérez fue la bandera de la agresividad en el quite. Además, para llegar al área, los brasileños necesitaban de muchos más toques (o una esforzada apilada del inquieto Gerson) que los de Núñez.
 
A los 25′, en una recuperación acelerada, Suárez remató desde el borde del área, rebotó en un defensor y cayó en el techo del arco, en la segunda aproximación de la Banda. A los 36, Borré pivoteó tras una contra y Exequiel Palacios remató desde la puerta del área: la pelota pasó muy cerca de la valla de Diego Alves.
 
River redondeó una primera parte seria, en la que sacó ventaja de su experiencia en instancias decisivas (10 títulos en los últimos cinco años) y con el manual de Gallardo en los botines.
 
El segundo tiempo continuó con el mismo panorama. Un River aplomado sostuvo las riendas del desarrollo. Gabigol, bien contenido, recién consiguió rematar al arco al minuto de la segunda parte, con un intento que contuvo Armani sin problemas. El Millonario avisó dos veces; con una mediavuelta de Suárez y otro tiro lejano de Palacios.
 
A los 11′ del segundo tiempo, la primera gran polémica. Montiel quedó tendido en el área tras una pelota parada. Flamengo salió inmediatamente de contragolpe a pura velocidad por el carril que dejó huérfano el lateral. Bruno Henrique llegó a fondo, tiró el centro atrás y Gabigol buscó el arco, pero el balón se topó con la humanidad de De la Cruz. Del rebote probó De Arrascaeta y atajó Armani.
 
Más allá de los reclamos de River por la falta de solidaridad del Fla, el árbitro Roberto Tobar demoró el reinicio de las acciones porque el VAR chequeó la acción por un posible penal. En efecto, tras el tiro del centroatacante, la pelota dio fortuitamente en el brazo del uruguayo, que no intentó ampliar el volumen de su cuerpo, al contrario, intentó quitarlo. De no haber estado, la pelota hubiera dado en el torso; tenía otro obstáculo en el camino hacia el arco.
 
Con el correr de los minutos, la presión de River perdió intensidad, producto del desgaste que realizó en los primeros 60 minutos. Gallardo fue moviendo el banco para subir la barra de energía (sorprendió con Julián Álvarez por Nacho Fernández), pero Flamengo incluyó a Diego, un organizador de juego, y empezó a encontrar algo más de condimento en sus ataques.
 
Pero a tres minutos del final falló Pratto. De Arrascaeta se filtró por la izquierda y encontró a Gabriel Barbosa, que anotó el 1-1 cuando el Millonario parecía empezar a alzar el trofeo. Y 60 segundos después la pelota le volvió a quedar al centroatacante, que de derecha puso el impensado 2-1.

 River sufrió dos goles en dos minutos y se le escapó de manera increíble la final de la Copa Libertadores ante Flamengo