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Por Claudio Ruax*

En este artículo nos alejaremos de Italia para pasear por una de las regiones más renombradas de Francia, la Provenza (Provence en francés).

Asociamos a esta tierra los campos de lavanda, la Costa Azul, Montecarlo, Antibes, Cannes, Nizza…pero en realidad la Provençe es mucho más. Esta región se extiende al sur de Francia y limita con Piemonte y Liguria, permitiendo un flujo constante de turismo entre los dos paises.

Considero que la Provence dá lo mejor de si cuando nos adentramos en pueblitos que se arrocan en los primeros relieves de los Alpes marítimos.
Alli está ese atelier a cielo abierto, Saint Paul de Vence. Hermoso centro historico rico de pinturas y artistas. Por aqui pasaron Monet, Renoir, Henry Matisse, Marc Chagall, Picasso y Mirò entre tantos otros. Antes de ingresar en su centro amurallado una plaza se abre ante nosotros, un grupo de personas juega a las bochas mientras me siento en el Cafe de la Place a saborear una copa de buen vino provenzal.

Saint Paul de Vence

La Provence es una región rica de perfumes, el mar, la vegetación y su aire generan una variedad de aromas que nos acompañan siempre por sus calles, sus playas y sus callecitas… y si de perfumes hablamos nos encaminamos a Grasse, llamado el pueblo de los perfumes donde se encuentran las perfumerias Galimard, Molinard y Fragonard, esta última puede ser visitada.
La entrada es gratuita y nos permite conocer los alambiques y instrumentos del siglo pasado en un recorrido de museo que termina en la sala de los perfumes donde quien quiere puede comprar a precio de fabrica.

Su centro historico merece una visita, sobre todo la Place de la Poissonnerie (Plaza de la Pescadería) en su centro se encuentra una de las construcciones mas bellas que he visto en una plaza. Una pequeña plazoleta techada en hierro (ver foto) nos recibe entre callecitas y escaleras que nos invitan a seguir recorriendo este hemoso pueblo, en donde en el 1963 terminò sus días la cantante Edith Piaf llamada “el gorrión de Paris”. Grasse és el escenario donde trascurre parte de la novela El perfume, llevada al cine en el 2006 .

Place de la Poissonnerie

Siguiendo nuestro camino hacia el Oeste llegamos a Avignon y su famoso puente cercano al palacio papal, que nos recuerda que entre el 1309 y el 1377 el papado fue transferido de Roma a Avignon.

En cuanto al puente se refiere fue construido en el 1171 sobre las bases de un puente romano. Luego fue destruido en el 1226 por las tropas franceses que combatían la cruzada contra los cátaros. Desde entonces se busco reconstruirlo numerosas veces pero padeció numerosos derrumbes hasta que en el 1660 después de una gran crecida de río Ródano el puente fue destruido quedando en las condiciones que presenta hoy. La canción Sobre el puente de Avignon que fue escrita en el siglo XVI se cree que fue inspirada a los bailes que se hacían en la isla que cruzaba el río, por ello todos bailan, todos bailan.

El puente de Avignon

El palacio llamado de los papas es mas una Fortaleza que un palacio, y se encuentra, como decía, de frente al puente. De lineas duras y formales nada tiene que ver con los “palazzi” que el papado usaba en Roma. También en Avignon su centro historico esta rodeado de una muralla medieval que nos hace pensar como era dificil ingresar en estas ciudades en los siglos del medioevo.

Palacio papal de Avignon

Después de visitar estos pueblos y ciudades, dejando para otra vez Aix en Provence y Arles con su coliseo romano, paseamos por los clasicos campos de lavanda, únicos, hermosos, que nos despiden del interior de la Provence para dirijimos hacia la Cotè d’azur y sus famosas localidades.

Campos de Lavanda

Iniciaremos por Antibes, con un casco historico a pico sobre el mar, único lugar en toda la costa azul a mantener el conglomerado medieval en excelentes condiciones. Sus playas de arena como talco nos invitan a un chapuzón antes de seguir el viaje y un vino rosè de la provenza apacigua nuestra sed de caminos. Las playas de Antibes se encuentran muy cerca del centro lo que nos permite un paseo por el Cap d’Antibes donde admiramos pequeñas y encantadoras bahias…

Antibes es tambien la sede del Museo Picasso. El maestro malagueño vivió y creó muchas obras en Antibes. Despues de visitar el museo, recomiendo un paseo por el Mercado que abre todas las mañanas en pleno centro.
Los escaparates de los negocios, sus carteles, los infaltables faroles, las pequeñas plazas, los castaños, y las ventanas con postigos pintados del clasico azul provenzal crean el marco ideal para perderse por las callecitas empedradas. Aqui también los aromas nos acompañan. El olor de las baguettes y croissants recien horneadas en las boulageries (panaderias) nos invitan a entrar..

Playa en Cap d’Antibes

Dejamos atrás Antibes y nos encaminamos para otras playas tan bellas como estas. Ya el atardecer deja lugar a la luna que platea sobre el mar y es tiempo de sentarnos a degustar un buen plato provenzal, nos encontraremos en otro artículo donde continueremos nuestro viaje por la Costa Azul... en tanto bon appètit!!

Claudio