Buscá en el Archivo de MasterNews

Historias que me cuentan... Imprimir
Usar puntuación: / 18
MaloBueno 
Martes, 23 de Julio de 2013 09:09

Por Claudio Ruax desde Italia para Master News

 

 

Caminando por los senderos de esta tierra piemontese donde vivo, tantas veces me he detenido a pensar cuantas personas a lo largo de estos dos milenios ha pasado por aqui, conquistadores y conquistados han recorrido estos rípidos caminos y en ellos han dejado sus huellas, visibiles aún para el viajero atento y ávido de historia.

 

Historia que en estas tierras se respira y se toca a cada paso.

Creo que es el momento de hacer un recorrido por castillos, fuertes y valles que son parte del paisaje que me rodea.

Como he dicho en otra oportunidad, el pueblo donde vivo se llama Gavi, donde se produce el homónimo vino blanco. Situado a los pies del apenino ligure-piemontese en la región del Piemonte, siempre ha sido un pequeño centro habitado con una importante influencia cultural Ligure, sea en su arquitectura, en el trazado de sus calles, en su dialecto y su cocina típica.

Pues bien este pequeño pueblo es rico de historia, la tribu que abitaba estas tierras a la orilla del torrente Lemme (que todavia hoy pasa por el centro de Gavi) era la tribu Cavaturina, llamada despues Gavatium y posteriormente Gavium, se retiene que ya en epoca romana era un presidio en defensa de la Via Postumia, despues de caida del Imperio Romano fue conquistada por los Godos, despues fue invadida de los húngaros (considerados como tribu y no como ciudadanos de Hungría) y los Sarracenos o también llamados Otomanos. En el monte que domina el pueblo, sede del Fuerte de Gavi, se han encontrado distintos vestigios de armas Sarracenas, de alli que el monte se llame hoy monte Moro. Los primeros documentos oficiales son anteriores al año mil.

Gavi hospedó por tres meses a Federico Barbarroja y su corte despues de la batalla de Legnano (1176) ya que Gavi era un feudo del Imperatore del Sacro Imperio.
Muchos siglos despues el fuerte fue tomado por las tropas napoleónicas. Y en el mil novecientos fuè carcel de los presos austríacos durante la primera guerra mundial, de cuyo inicio se cumplirá un siglo el proximo año (1914-2014).

A proposito de la primera guerra mundial, conocida aqui como la gran guerra existe en Arquata Scrivia, pequeño centro habitado cercano a donde vivo, un cementerio inglés. Como es posible? , justamente, entre 1917 y 1920 las tropas inglesas acamparon en los alrededores de Arquata y muchos de sus oficiales se enfermaron de una gripe llamada Española que fue epidemica entre el 1919 y el 1920 muriendo sin siquiera combatir, por ello fueron enterrados aqui.
En 1923 el rey de Inglaterra Jorge V estuvo en Arquata Scrivia visitando el cementerio.

Imagen de Gavi


Como ven, qualquier pequeño pueblo en medio de estos valles tiene una historia riquisima de culturas, y conquistas. Por estas tierras paso Napoleón, que combatió y ganó la batalla de Marengo en el 1800 a unos veinte kilometros de Gavi, antes el emperador Federico Barbaroja estuvo aqui.
Romanos, visigodos, tropas austriacas, partigianos italianos en la segunda guerra mundial combatieron en estos valles contra los nazistas... la historia se toca en estos montes.

Viejas capillas de estilo romanico nos acopañan en nuestro paseo, entre las ruinas de lo que alguna vez fue un castillo, las torres todavia en pie se alzan en el horizonte.

Castillo de Francavilla Bisio

 


Imaginar la vida de estas personas dentro de estos castillos nos resulta facil ya que en algunos casos podemos visitarlos y entender que en las largas noches de invierno el frio no se podía combatir. La leña que quemaba en los hogares no llegaba a calentar estos ambientes grandes y altos. Debajo de estos castillos se desarrollaba el burgo cuyos abitantes eran protegidos por el señor feudal a cambio de trabajo y provisiones. Fué así que se dessarollaron los centros historicos de estos pequeños pueblos al pie de los castillos.

Volveremos a hablar de estas construcciones en un futuro artìculo.

 

 

Vista de Voltaggio

 


Siguiendo nuestro camino encontramos Voltaggio, centro habitado del alto valle del Lemme es el lugar ideal para refrescarse en sus aguas. Por senderos que pocos conocen, se llega a verdaderos pozos de agua cristallina que baja de los pasos apeninicos entre las altas rocas que forman un pequeño cañón, alli las truchas nadan con nosotros y el agua transparente crea este oasis entre los montes donde al atardecer se enciende el fuego cerca de rio y se asa un poco de carne… momentos del alma para serenarse y escuchar los ruidos del monte que nos habla, los montes non cuentan las historias y leyendas de estos parajes que he aprendido a amar en estos años.
Estan escritos en las piedras, en los arboles añosos que nos dan sombra, en las riberas de estos torrentes donde caballos y jinetes apaciguaron su sed… los pasos afelpados en la nieve de los pueblos que por aqui pasaron se pueden todavia sentir, basta sentarse en una piedra del río, y esperar… la historia seguramente nos vendrá a buscar para llevarnos de la mano por este libro que puede ser leido por qualquiera de nosotros, siempre y cuando sea sediento de escuchar historias, fabulas y leyendas de principes, reinos, ejercitos y caballeros como aquel, que dobla el recodo del camino para esconderse dentro del bosque... es bueno volver siempre a estos caminos.

Un corcel y una doncella nos esperan.

Claudio
 

Historias que me cuentan...